El sufrimiento psicológico es el más profundo e incomprendido.
Cuando le digo a alguien “Lo que te pasa tiene un componente biológico” siempre me responde con la misma pregunta “¿Eso quiere decir hereditario?”, y yo suelo responder que no lo sé, que tal vez.
Hace poco oí que conocemos el 20% de nuestro cerebro. Pero, con lo poco que sabemos, conocemos la base «física» de algunos trastornos.
Hace poco oí que conocemos el 20% de nuestro cerebro. Pero, con lo poco que sabemos, conocemos la base «física» de algunos trastornos.
Y la experiencia me corrobora que algunas enfermedades están en “el cuerpo” de las personas, y esas personas tienen obsesiones, igual que otras pueden tener diabetes.
Desde la psicología podemos ayudar a estas personas, ayudarlas a entender lo que les pasa, a controlarlo y también a aceptar. Y algo importante, debemos quitarles el sentimineto de culpa.
Desde la psicología podemos ayudar a estas personas, ayudarlas a entender lo que les pasa, a controlarlo y también a aceptar. Y algo importante, debemos quitarles el sentimineto de culpa.
En nuestro mundo, tener problemas psicológicos es un signo de debilidad, a veces de egoísmo o de torpeza. Las personas que tienen este tipo de problemas suelen arrastrarlos durante años, desde la niñez en muchas ocasiones. Acostumbran a encontrarse con mucha incomprensión a su alrededor.
En el terreno de la psicología hay mucho “gurú”, much@ “bruj@”, estos “profesionales” hacen creer a los pacientes que son responsables-culpables de todo lo que les pasa. Y se refugian en la superstición, en esa creencia pseudoreligiosa de que todo tiene un por qué, algo así como una explicación cósmica.
A veces, podemos encontrar la causa concreta de un trastorno, eso es estupendo porque actuamos directamente sobre dicha raíz.
Otras veces, la mayoría, se mezclan muchas cuestiones -familia, aprendizaje, ideas irracionales et. etc.- y en algunas ocasiones el sufrimiento del paciente es tan intenso que no se puede explicar con una o varias razones, hay personas que tienen enfermedades que solo podemos paliar, enseñar “trucos” para vivir con ellas. Y, a veces lo más importante, liberar a estos pacientes de la culpa de ser así.
Otras veces, la mayoría, se mezclan muchas cuestiones -familia, aprendizaje, ideas irracionales et. etc.- y en algunas ocasiones el sufrimiento del paciente es tan intenso que no se puede explicar con una o varias razones, hay personas que tienen enfermedades que solo podemos paliar, enseñar “trucos” para vivir con ellas. Y, a veces lo más importante, liberar a estos pacientes de la culpa de ser así.
Cuántas veces oímos los psicólogos la frase “me gustaría ser como los demás”. Los que dicen esto creen que todos menos ellos son felices y se sienten terriblemente cansados y culpables por ser tristes y complejos. Están hartos de oír “Te quejas porque no tienes ningún problema real”. Los psicólogos sabemos que estos problemas no solo son reales sino muy dolorosos. Hay que aprender a dominarlos… sin magia… con ciencia.